29 abr 2012

XVIII Medio Maratón Bilbao 2012

Cartel.
Por la mañana.
Segunda media maratón que hago.
Esta vez en mejores condiciones que la anterior (no tenía resfriado), y con mejores expectativas de marca.
En principio se todo va bien estaré entre 1:40 y 1:35.
Y si todo va super bien, a saber donde...
No llueve, lo cual tras el mes de Abril que llevamos es toda una noticia. Creo que hemos tenido 44 horas de sol en todo el mes.
http://www.deia.com/2012/05/02/sociedad/euskadi/el-pasado-abril-fue-uno-de-los-menos-soleados-de-la-historia-en-euskadi
Lleva sin llover desde que me levanté, pero no las tengo todas conmigo y la previsión es que caerá lluvia durante la carrera.
Me decido a salir con algo de ropa de lluvia, y con una camiseta. Es decir, con la térmica de manga larga por debajo y la camiseta negra encima.
Caso de no llover, no creo que me incomode mucho, y caso de llover, con esa ropa voy bien. Además, si por lo que fuera hiciera calor, me quito la camiseta y me quedo con la térmica.
Esta vez llevo el GPS y decido poner el programa en el que cada etapa es libre, de manera que cuando pulse la tecla de LAP iré tomando distintos parciales. Así según vea los distintos terrenos podré saber como los he hecho, tanto en carrera como en casa, sobre todo en casa.



Perfil.
SALIDA.
Caliento por un cuarto de hora más o menos, con unos estiramientos antes. Troto un rato, paso al baño y troto un poco más para hacer un par de rectas antes de tomar posición en la linea de salida.
Antes me tomo la bebida energética, que tan bien me ha ido en otras carreras.
Estoy bastante bien colocado y veo a corredores conocidos.
El que la salida sea con una cierta cuesta arriba en los dos primeros kilómetros me crea cierta desconfianza, pero es lo que hay. Hubiera preferido terreno llano o cuesta abajo para entrar en ritmo, pero por otro lado no es ninguna subida fuerte, solo un falso llano. A fin de cuentas el perfil de la carrera es bastante parecido, pequeñas subidas y pequeñas bajadas casi todo el rato. Sobre el papel son falsos llanos que me pueden engañar un poco los ritmos, pero espero recuperar en las bajadas lo que me deje subiendo.
No he calentado mucho, pero confío en entrar poco a poco en ritmo.
Un poco antes de la hora de la salida ya estoy estirando un poco en la linea esperando.

Primeros dos kilómetros en falso llano de subida y bajada.
Hasta el Km 2,03. Tramo en 8:46s a 4:19 min/km. 176 ppm medias. Ritmo carrera 4:19.
Paso por Autonomía, saludo a la familia.
No tomo referencias y casi ni miro al pulsómetro hasta no haber pasado los dos primeros kilómetros.
La subida de Hurtado Amézaga y el sube baja de las rampas de Autonomía me sientan un poco mal.
Cuando veo el paso por el Km2, voy mucho más despacio de lo que me hubiera gustado, pero no quiero quemarme nada más salir, y sabiendo que el terreno no es favorable doy el ritmo por bueno.
A mitad de Autonomía está la familia al completo saludando y animando. Ana, Leyre y Borja en la silla. Paso cerca suyo y les saludo con una palmada a Leyre que pone la mano para que le choque. No voy muy suelto y las pulsaciones las tengo un poco altas para lo que me gustaría, pero voy a ritmo que podré mantener más o menos.
En todo momento creo que debiera de ir más rápido, pero no quiero exigirles más a las piernas, pues siento que voy apretando y acabo de empezar.
Esta vez no progreso entre la marea de corredores, y son más lo que me pasan, que los que yo sobrepaso.
A Leyre le gusta que le choquen y siempre...
... hay corredores pendientes de esos detalles.
Algunos de los que me pasan tienen muchos boletos de caer, pero otros no sabría decirlo. Como por ejemplo un grupo de tres corredores muy musculosos que corren por delante mio con una camiseta de un toro en la que se puede leer "primera de fusileros". Militares, y van a muy buen ritmo.
Ni se me ocurre seguirles, pues seguro que están muy bien preparados. En contra de lo que pareciera por el físico si que les veo con fuerzas de acabar la carrera al ritmo al que van.
Juan Carlos 1:32:50.
Al final alguno quedó por delante mio y otros por detrás.
Iñaki acabó en 1:33:37.
Intento coger referencias, pero no veo a nadie adecuado. Los corredores conocidos que veo son más rápidos que yo, y prefiero mantenerme a mi ritmo.
Veo como se aleja un corredor con una cinta característica que lleva en la cabeza con el que estuve hablando tras la carrera del parque Ollargan, Juan Carlos. Y a su lado, otro con el que terminé la Bilbao-Bilbao que al final me pasó en los últimos metros. "Iñaki" creo recordar. No he hablado con él, pero le recuerdo perfectamente. Le supongo con más fondo que yo. Pienso que estos irán más fuertes que yo (y así fue). Si luego les reduzco será buena noticia, pero me olvido de ellos.

Ligera cuesta abajo y bajando al final.
Hasta el Km  5,054 (3,024). Tramo en 13:08s a 4:22 min/km. 179 ppm medias. Ritmo carrera 4:20.
Al final de Ametzola me pasa una chica que corre con otro de igual camiseta (foto) y que van con un grupo a bastante buen ritmo. Me pasan con mucha solvencia y aunque se que su ritmo es constante y muy bueno, pienso que está fuera de mi alcance y no hago amago siquiera de seguirles.
Según fue avanzando la carrera me di cuenta de que había hecho lo correcto. Al final la chica fue la que ganó en la categoría de féminas (1:29:53).
Grupo que me pasa con buen ritmo.
Vamos camino de Zorrotza, por la carretera por la que suelo entrenar cuando voy a hacer series. La verdad es que se va más cómodo por el asfalto que por la acera, pero aún así no termino de rodar lo suelto que me gustaría. Aún y con todo veo que voy a buena media, pero sabiendo las cuestas que me quedan en unos kilómetros, creo que bajaré mucho el ritmo.
Esta vez corro en solitario sin acoplarme a ningún corredor, ni engancharme a ningún grupo.
El terreno es en ligera bajada, pero no invita a muchas alegrías. En la parte final antes de la pista de Atletismo si que hay unos metros en los que me dejo llevar al haber más desnivel y recupero alguna posición.

Pista de atletismo y por el matadero.
Hasta el Km 8,029 (2,975). Tramo en 12:55s a 4:20 min/km. 179 ppm medias. Ritmo carrera 4:20.
Nos cruzamos con algunos de los corredores que salen de la pista de Atletismo y veo a la chica que me pasó al final de Ametzola. Menos mal que no intenté ir a su paso, pues no me hubiera hecho gracia correr roto desde antes del kilómetro 10.
Al paso por la pista voy un poco atascado, pero me mantengo sin ceder muchas posiciones.
Además, a lo tonto ya he hecho unos cuantos kilómetros. Ya queda menos.
No hago caso del avituallamiento de la pista. Este primero creo que me lo puedo saltar, y el cuerpo no me pide agua.

Parte trasera hasta inicio de subida.
Hasta el Km 9,042 (0,977). Tramo en 4:19s a 4:26 min/km. 179 ppm medias. Ritmo carrera 4:19.
Vamos por la parte trasera buscando volver por parte del camino que ya hemos hecho.
Vuelvo a correr en solitario y no tengo ningún grupo ni por delante, y lo que más me sorprende, nadie en unos metros a mi espalda.
Al dar la vuelta al pivote veo que viene un grupo bastante compacto de corredores con buena pinta reduciéndome distancia. Pienso en que en poco me alcanzarán y en coger su ritmo entonces.
Cuando llegamos al final de la carretera y enlazamos con el paseo viene la gran decepción.
En vez de hacer toda la ribera hasta el puente de Euskalduna, lo cual significaría un terreno llano y bien conocido, veo que el reguero de corredores sube por la pasarela peatonal y retorna por la misma carretera que antes habíamos bajado.
Gran decepción, pues significa que en poco menos de 3 kilómetros no pararemos de subir, para luego descender todo lo ganado en una cuesta que es seguro va a tener demasiada pendiente como para correr fino. Es decir, que me dejaré unos buenos segundos entre lo que perderé en la subida y lo que no recuperaré en la bajada.
 
Subida por la pasarela y resto hasta el km 10.
Hasta el Km 10,024 (0,982). Tramo en 4:48s a 4:53 min/km. 179 ppm medias. Ritmo carrera 4:23.
Rodando aún cómodo.
Subimos la pasarela peatonal y seguimos subiendo por la carretera que antes habíamos bajado. Decido no apurar en las subidas, pues ya voy bastante justo y eso que aún no hemos llegado al km10. De todos modos no pierdo posiciones y veo que la gente no apura en las subidas.
Ya he descartado el hacer una marca sobre los 1:32-1:33. Y me pregunto si seré capaz de llegar por debajo de 1:35. A mitad de subida me encuentro el kilómetro 10, y tomo la referencia. 44 minutos casi exactos.
Las pulsaciones las sigo llevando muy altas, pero dentro de lo "normal" en carrera para mi. Sobre 178 de media, y picos de 181-182 en subidas.
Es cerca de un minuto más lento que el paso que hice la semana pasada, pero teniendo en cuenta que entonces empezamos con dos kilómetros de bajada y luego una ligera subida poco pronunciada, y hoy no hemos tenido más que sube y baja, doy el tiempo por bueno. Lo que no tengo claro es si podré mantener las fuerzas para los próximos 10 km, lo cual me daría un tiempo sobre 1:33-1:34.
Mientras lleve el acumulado por debajo de 4:28 estaré para bajar de 1:35, y por el momento me queda algo de margen, ya que según van pasando los kilómetros va siendo más y más difícil tanto rascar como caer segundos del tiempo acumulado.

Más subida.
Hasta el Km 11,214 (1,19). Tramo en 5:34s a 4:41 min/km. 179 ppm medias. Ritmo carrera 4:25.
El último tramo de subida se hace más llevadero. De lo malo malo en todo el ascenso no he querido apretar mucho, pero aún así he pasado a algún corredor.
Paso por el avituallamiento y veo que son plátanos y naranjas. Casi sin saber como, echo mano de un trozo de naranja cortada y de un cacho de plátano. Hasta yo me sorprendo de la fluido que me ha salido la maniobra.
Casi como si fuera un acto reflejo.
Estoy detrás del mismo corredor que antes del puesto, sin haber cedido ni un segundo. Muerdo la naranja, que me sabe a gloria y pelo el trozo de plátano. Lo meto en la boca y termino la subida con toda la boca pastosa de plátano. Lo trago y pienso que me vendrá bien para el final de la carrera.
Ya vemos el punto en el que hemos de empezar a bajar.

Bajada empinada.
Hasta el Km 12,046 (0,832). Tramo en 3:22s a 4:03 min/km. 175 ppm medias. Ritmo carrera 4:23.
Tal y como pensaba, la bajada es demasiado pronunciada. Es la primera vez que paso por aquí.
Vamos todos frenándonos.
Recupero alguna posición de carrera, pero lo que es seguro es que no voy a poder recuperara todo el tiempo perdido en la subida. Veo que corro sobre 4:00, y con dificultades.
A mitad del descenso está el puesto de avituallamiento líquido. Cojo un vaso de agua y me limpio las manos del zumo de naranja de antes. Las tenía todas pegajosas y no se porque, me incomodaba para correr.
Le pego un sorbo y paso lo que me quedaba de plátano, tiro el resto.
Otra vez lo hago sin aminorar.
Corredor de trotar alegre. Llegó en 1:33:47
Me sorprende que hay corredores que paran en los avituallamientos y luego reemprenden la marcha. Paso a unos cuantos que iban más adelantados y salen de reponer fuerzas un poco más atrás. Yo prefiero hacerlo del tirón, pues me da la sensación de que el pararme me va a romper el ritmo. Aunque no voy fresco, tampoco voy tan cansado.
En la bajada contacto con un corredor de camiseta blanca que lleva un trotar muy alegre.
Me había pasado dos veces anteriormente y le había recuperado en las bajadas.
No tenía sensación de haber ganado posiciones, pero puede que entre la bajada y el prácticamente no perder tiempo en los avituallamientos, haya ganado algún metro.
La bajada es más larga de lo que esperaba y para mi desgracia, sigue siendo demasiado pronunciada prácticamente hasta el final.
Siento como se me escapan segundos en cada zancada que voy frenando.
Pero desde luego que no tengo las piernas como para ponerme a aprovechar el desnivel.

Llano, subida al Euskalduna, bajada y subida otra vez.
Hasta el Km 14,616 (2,57). Tramo en 11:43s a 4:33 min/km. 177 ppm medias. Ritmo carrera 4:25.
Por fin llegamos abajo. De haber ido por la ribera hubiera sido un terreno prácticamente llano, pero este sube baja me ha matado.
No lo sabía mientras hacía la cuesta, pero tras llegar al final, siento las piernas completamente machacadas.
Paso por el Euskalduna y ...
... Leyre me da un bidón de Powerade.


Por delante hace tiempo que he perdido la referencia del corredor de cinta en el pelo, pero eso era de esperar. Le había seguido desde la salida y corrí con él en Ollargan, pero es un corredor mucho más entrenado y en esta carrera me sacará aún más distancia. Si todo llega a salir muy bien, hubiera sido buena señal rodar con él.
Por otro lado sigo manteniendo la distancia con la corredora de camiseta fuxia. Manteniendo o reduciendo ligeramente.
El caso es que llevo unos kilómetros presionando y apretando dentro de lo que considero puedo apretar para no romper antes de llegar, y no voy nada cómodo. Tras el llano llega la subida al puente de Euskalduna y si todo ha salido bien, allí volverá a estar la familia. Le he dado una botella de Powerade a Ana para que me la de en este punto, ya que a priori, consideraba que los kilómetros que se me iban a hacer más duros iban a ser los que van del 12 al 15, ya que en el 15 entre el avituallamiento y la toma del gel, la cabeza se va despejando, y los últimos kilómetros esperaba hacerlos ya contando en negativo, con sufrimiento, pero con algún objetivo en mente y sintiendo la llegada.
Reponiendo líquidos en el puente.
Gracias a Dios. Tras llegar a lo alto del puente y empezar el giro, veo a Leyre con la botella en mano dispuesta a dármela.
Gran alegría.
A unos metros le tiro el puff para el cuello con el que había salido y que lleva algún kilómetro molestándome. Si lo hubiera pensado antes hasta le hubiera dado la camiseta, que a esas alturas también me sobraba. De la misma cojo la botella. Saludo a Ana y a la cámara y emprendo la bajada con algo más de moral.
Durante la bajada voy dando pequeños sorbos al Powerade, que me ayuda a quitar trozos de naranja que aún tenía entre los dientes. Corro en paralelo con el hombre que llevaba un ritmo vivo.
Bajada por el puente, la cosa se empezaba a poner dura.
Tras bajar el puente vamos unos metros juntos, pero por desgracia para mi veo que no puedo correr con él.
Lleva bastante más cadencia que yo y al correr con él tiendo a solaparme a su ritmo de zancada. En pocos metros veo que es excesivo para mi. A esa cadencia me rompo en menos de tres kilómetros.
Le ofrezco la bebida, pero me dice que no quiere y me lo agradece. Añade, que tras todos estos años de correr, aún no ha aprendido a beber corriendo. Se ríe y yo también.
La verdad es que con botellas como la de Powerade, que tienen un sistema que te hace que tengas que chupar para que caiga líquido, el beber a sorbos es mucho más fácil. Mucho mejor que con vasos, pero no ando fresco como para comentar mucho más.
En cuanto vuelve a empezar la subida hacia San Ignacio, se me escapa y aunque de velocidad va muy bien, es casi un descanso deshacerme de su cadencia. Veo que voy bastante roto y decido que no voy a esperar más a tomar el gel. Abro el Gel y lo tomo poco a poco  con calma. Luego doy algún sorbo más al Powerade. Un kilómetro antes de lo pensado he dado buena cuenta del gel. No todo lo voy a hacer en el segundo y décima previsto, mejor dejar un margen para adaptarse a las circunstancias.

Vuelta.
Hasta el Km 16,126 (1,51). Tramo en 6:45s a 4:29 min/km. 178 ppm medias. Ritmo carrera 4:25.
Zuriñe terminó con 1:34:42.
La subida se hace bastante dura. No voy bien de ritmo, pero tampoco mal. El ritmo acumulado me indica que si consigo mantenerme estaré por debajo de 1:35, lo cual me da bastante moral y aprieto con ese objetivo en mente.
Durante toda la carrera he ido solo, con corredores que me pasaban y a los que volvía a pasar para volverme a rebasar. Ahora vamos en fila india con lo puesto. Alguno viene fuerte por detrás y nos adelanta con solvencia, pero más o menos estamos los mismos en los mismos puestos y a la misma distancia. Reducir diez tristes metros a alguien es todo un esfuerzo.
Durante la zona en la que nos cruzamos con los corredores que van bajando cuento las chicas con las que me cruzo.
Cuento a cuatro por delante mío, y una de ellas (Zuriñe) sigue a escasos 60 metros. A los mismos 60 metros a los que ha estado durante los últimos 6 kilómetros. Tiene gracia comprobar como ahora 30 metros son un mundo. Incluso 3 metros pueden ser un abismo.
Mentalmente pienso que en los dos últimos kilómetros me puedo lanzar a por ella, pero ahora es demasiado pronto.
No me decido a rodar a ritmo de nadie, pues justo cuando llegamos a la zona en la que se da la vuelta a un pivote para desandar camino, me encuentro con algunos atletas que van doblados y trotando.
Zona en la que peor lo pasé.
A estas alturas, ninguno estamos libres de sospecha, y no sabes si el que tienes delante tuyo va a romper o no.
Esta distancia y a estos ritmos, nos rompe a los populares. Y cuando rompemos, no bajamos el ritmo, simplemente paramos. Los que tienen más pundonor vuelven a la carrera, tras un descanso, pero prefiero dosificar para no pinchar tanto. La sensación es de ir muy lento, pero la posición de carrera se mantiene. Me animo pensando que estoy sacando la carrera a base de sufrir en todo momento.
El terreno debiera de ser en suave bajada, pero parece que no hacemos más que subir.
Son las cosas que tiene el running, la semana pasada rodaba hasta más rápido con menos esfuerzo, y esta sufro, pero tengo un buen objetivo al alcance y me motivo con ello.
El sub 1:35 es aún posible.


Llano.
Hasta el Km 17,016 (0,89). Tramo en 4:11s a 4:42 min/km. 177 ppm medias. Ritmo carrera 4:26.
Ahora lo estoy pasando fráncamente mal.
Estoy en una zona llana tras la ligera bajada que me empujaba y las piernas me pesan muchísimo.
La bajada me falseaba el ritmo que llevaba y ahora he visto que voy sin fuerzas.
Me han pasado tres corredores, a los cuales les he mirado con la misma cara con la que mira la vaca pasar al tren.
A otro más he conseguido engancharme y al pasar por el avituallamiento he cogido un vaso de agua que me he tirado por las piernas.
Me ha dado algo de refresco.
A 200 metros está otro puesto de esponjas y me tiro agua por la nuca. El tiempo corre a mi contra y a mi favor. Simplemente aguantando el ritmo pronto acabaré la carrera, pero cedo mucho tiempo en esta última parte y aún queda lo peor.
Me preparo para un último esfuerzo, pero aún es pronto.

Llano buscando el repecho del puente de Deusto.
Hasta el Km 19,196 (2,18). Tramo en 10:08s a 4:39 min/km. 177 ppm medias. Ritmo carrera 4:28.
Corredor con el que hice los últimos km.
Vuelvo a intercambiar unas palabras con un corredor que tiene más fuerza que yo pero que tampoco va sobrado y comentamos que tenemos el sub 1:35 al alcance que queda el repecho del puente y el tramo final que pica para arriba.
A estas alturas a mi me da la sensación de que todo pica para arriba.
Pufffffff.
Vuelvo a pensar en no desfondarme en la subida.
Decido intentar mantener la posición de carrera y guiarme por eso, para no revolucionarme. Hacemos toda la zona del bidegorri hasta el puente de Deusto y las piernas van pesadísimas, pero aún así he revivido en los últimos metros y voy sobre los 4:25 en este último tramo.
Por terreno conocido corro con más confianza. Voy cogiendo ritmo y dejándome llevar. El bache tras la bajada parece superado.
El corredor con el que hablaba me pasa poco antes de la subida y yo me relajo preparándome para un último esfuerzo, la batalla final. La cuesta me sale bastante bien, cambio la cadencia y al doblar para coger el puente de Deusto, veo que si que he reducido a la Zuriñe de fuxia y a un grupo que llevaba delante.

Llano tras la subida.
Hasta el Km 20,130 (0,934). Tramo en 4:12s a 4:30 min/km. 179 ppm medias. Ritmo carrera 4:28.
Me pasó en los últimos 500m.
Tras girar, aprovecho el calentón del momento para intentar rodar fuerte. Quedan poco menos de dos kilómetros y veo claramente como le reduzco distancia a Zuriñe. El terreno no es como para muchas alegrías tras tantos kilómetros en las piernas, pero poco a poco me acerco a ella.
Es la única referencia que sigo.
Hacemos la rotonda y en un pequeño acelerón me pongo a su altura.
Ya solo queda el último kilómetro. La carretera pica otra vez ligeramente hacia arriba, y voy contando en negativo. Aún me queda alguna fuerza para mantener el ritmo, y el acumulado de carrera que llevo me hace pensar en que voy a poder conseguir el sub 1:35.

Ligera subida y META.
Hasta el Km 21,116 (0,986). Tramo en 4:26s a 4:30 min/km. 178 ppm medias. Ritmo carrera 4:28.
Entrada con la familia detrás.
Ya enfilamos calles conocidas y el GPS me marca que queda menos de un kilómetro. Algún corredor me pasa progresando fuerte, pero yo no tengo esa frescura. He pasado a la Zuriñe y a algún corredor que va muy tocado. Al fondo veo la última curva a derecha. Aprieto, la tomo y al final a unos 200m se ve la meta.
Entrada. La meta debía de ser la pancarta de atrás (no lo sabía).
La enfilo con el piloto automático y hago toda la recta, subiendo el ritmo lo que puedo, pero sin esprintar. Busco con la mirada a Ana y a los niños. Pasan los metros y no están.
Se me acaba la recta de meta y vuelvo a tener la sensación de que igual no han podido llegar.
Se me está acabando la recta, pero a falta de menos de 50 metros les localizo animando casi en linea de meta.
Están muy bien colocados para que Leyre entre corriendo, pero no la veo en posición de correr. Sonriendo choco la mano con Leyre que se queda indecisa en el sitio pensando si salir o no. Paso por debajo de lo que creo es el arco de llegada y paro el reloj. Miro atrás y la veo con una carita de "yo quería entrar corriendo". Vuelvo a desandar los últimos metros y la cojo de la mano para que venga a entrar conmigo.
Entra dando saltos y con los ojos bien abiertos mirándolo todo. La animo en el paso por meta (o lo que parece meta, porque muy marcado no está) y nos encaminamos a recoger las bebidas, yogures y varios que nos dan en la meta.
A todo esto miro el crono y veo un 1:34:23. (1:34:17 tiempo oficial, luego es de esperar que la linea de llegada no fuera la que yo creía :-P )
Vuelvo a entrar con Leyre.
¡Esto si que es sufrir una marca!.
Sin saber muy bien como, y más con pundonor que con fuerzas he conseguido llegar por debajo de los 1:35.
Ya me siento un poco más corredor ;-)
Volvemos con el resto de la familia, y como no, Borja también quiere correr con Aita, damos unas vueltas corriendo entre los puestos. Parece que con eso se queda conforme.

Con estos hay que hacer todo por duplicado. Hasta correr.
Comento la carrera con Ana, que me cuenta la suya con los niños a cuestas para llegar a tomar vídeo en tres sitios. Desde luego que hoy hemos dado cada uno un do de pecho en nuestros distintos retos.

Esta chica (Susana) le paso a Zuriñe casi al sprint.
Al final no ha llovido en toda la carrera y la camiseta térmica se me ha hecho un poco pesada, aunque me la he ido remangando.
De lo malo malo el tiempo ha ayudado, aunque he de reconocer que me gusta correr con lluvia.
Desde pequeño me ha gustado.
Me da la sensación de estar haciendo una de esas cosas que tanto gustan a los niños, pero por las que siempre te castigan las madres.

Nos enteramos de que hay masajistas en un puesto tras diputación. Nos acercamos y ya voy notando que mis gemelos no me van a dejar moverme de allí hasta que alguien les ponga las manos encima.
Igor, conocido de la carrera de Ollargan.
En la cola me encuentro con un corredor conocido de la carrera del parque de Ollargan. En aquella estuvo más fino que yo, pero hoy he acabado un poco mejor.
Masajistas.
Quedamos para futuras carreras, pues andamos bastante parecido.
Luego un masaje que me recupera los gemelos y para casa sin prisa pero sin pausa.

De camino a casa vuelvo a mirar los tiempos y a repasar la carrera mentalmente.
Ya tengo una marca que considero respetable para un popular de mis características en media maratón, lo cual me llena de orgullo.

Tras la llegada, con muy pocas fuerzas.
No he hecho un plan de entrenamiento muy ortodoxo para preparar medias, pero todo lo corrido con anterioridad ha ayudado.
El circuito se me ha hecho más duro de lo esperado.
Los más veteranos comentaban en el autobús-cambiador que este año habían hecho peor tiempo y que el trazado no era igual que el de otros años por las obras.
Sea como fuere ya tengo un sub 1:35, y no se cuando volveré a correr otra media maratón, ya que entre mis objetivos se encuentran carreras de montaña y a medio-largo plazo una maratón, pero hasta finales de año no creo que vuelva a enfrentarme a una media.
Fortunato cerrando la carrera.

Otro corredor de la carrera del parque Europa.
Esta segunda ha sido más dura que la primera en cuanto a que he presionado mucho durante gran parte del camino y he estado a punto de romper al final, pero sin saber muy bien como, he  conseguido el objetivo.

Tras pasar unos días.
Tras la carrera escribo la crónica de los distintos tramos y de lo que me fue pasando por cada uno. La dicto en el teléfono y espero unos días a que estén las fotos de Festak y a editar un poco el vídeo que sacó Ana.
Repasando el calendario, la carrera del Parque de Doña Casilda la tenía mal apuntada, y no me coincide con la media maratón de Donosti.
Sin darme mucho tiempo no vaya a ser que me arrepienta, me apunto a la media maratón de Donosti, que es el 20 de Mayo, con lo que ya tendré otro tiempo más en media maratón.
En principio estará más masificada y es más llana. Con unas semanas más de entrenamiento y metiendo alguna tirada larga por monte y de kilómetros espero estar igual o mejor que en esta de Bilbao.

De todos modos me siento muy orgulloso de haber cumplido con este segundo gran objetivo del año.


2 comentarios:

  1. Sin duda un marcón.

    Enhorabuena!!!

    ResponderEliminar
  2. Benjamin Alonso6 jun 2012, 12:09:00

    Carrerón Victor!

    Llevaba algún tiempo sin pasar por aqui, y me encuentro con esta crónica... Pedazo de marca y pedazo de carrera, a falta de leerla más detenidamente me parece un logro extraordinario.

    Bueno, y antes de poner nada y por curiosidad veo que en la Media de Donosti bajaste a 1:33... Eso si que es un marcón!, espero leer la crónica pronto.

    Enhorabuena y... ¿cual es el próximo objetivo?. Un Saludo.

    ResponderEliminar